Portal sobre el trastorno límite de la personalidad

 

Borderline


¿Por qué esta persona que tanto me quiere, de repente me hace pedazos? ¿Me dice que soy talentosa y maravillosa pero luego se da la vuelta y me grita, me dice que soy despreciable y la causa de todos sus problemas?

Este es el infierno que vivió durante muchos años Randi Kreger sin saber porqué. "Me sentí abusada, manipulada y sin poder alguno. Luego de un tiempo comencé a creer que todo era culpa mía'', explica esta mujer que decidió escribir un libro sobre las dificultades de vivir con una persona que sufre de Trastorno de Personalidad Límite.

En inglés se conoce como Borderline Personality Disorder (BPD) y es una condición "muy compleja", indica el doctor Sergio Aguilar-Gaxiola, profesor de la Universidad de Davis, experto en la salud mental de los Latinos. "Lo más estable para el BDP es la inestabilidad'', agrega.

Esta condición se manifiesta usualmente en los adultos jóvenes pero pueden aparecer síntomas hasta en los pre-adolescentes. Se caracteriza por inestabilidad en el estado de ánimo, en las relaciones interpersonales, en la imagen de sí mismo y en el comportamiento en general. Es diferente en cada persona, sin embargo en muchos casos el enfermo se auto inflige heridas y puede llegar hasta al suicidio.

"Pueden estar tristes y luego contentos, son también obsesivos y usualmente están involucrados en actividades muy riesgosas, ya que no evalúan los riesgos'', explica el médico. Suelen tener relaciones sentimentales conflictivas y les cuesta mucho ser consistentes "y eso hace difícil su tratamiento ya que no le dan continuidad'', añade el experto.

Se sabe poco de este trastorno en comparación con otros desórdenes como el Trastorno Bipolar o Maniaco-Depresivo, donde el individuo también experimenta cambios bruscos de temperamento y también pueden llegar al suicidio. Las altas y bajas en los enfermos con BDP pueden ser de un par de horas. En las personas bipolares, pueden ser semanas.

"El Trastorno Bipolar es un desbalance químico en el cerebro, mientras que en el BDP , en la mayoría de los casos, los enfermos sufrieron algún tipo de abuso físico o emocional durante la infancia o exixtía una personalidad bipolar subyacente'', explica el doctor Eugenio Rothe, psiquiatra y profesor de la Universidad de la Florida.

Como cualquier animal, nuestra reacción instintiva es huir del peligro pero también estamos facultados para formar lazos afectivos con las personas que nos quieren y nos cuidan. ¿Qué pasa cuando esa persona que nos cuida también es el abusador? "La víctima huye del maltrato, pero luego no quiere estar sola, vuelve y nuevamente es maltratada. Ese ciclo se repite miles de veces y se produce una suerte de corto circuito en el cerebro que dificulta cualquier relación íntima en el futuro'', explica Rothe.

Según la Academia Americana para la Psiquiatría hay 9 indicadores que se utilizan para diagnosticar la condición. Por ejemplo, temor real o imaginario de ser abandonado, un patrón de inestabilidad en las relaciones interpersonales que se caracteriza por irse a los extremos; idealizar a la persona o devaluarla por completo. Una imagen y percepción de sí mismo que también presenta un patrón de inestabilidad. Otra consideración es si es impulsivo en al menos dos áreas que constituyen un peligro para su persona; con el dinero, en el sexo, abusa de sustancias ilícitas, no tiene cuidado al conducir, episodios en que come mucho y luego poco. Además está la conducta suicida, cambios en el temperamento, sentirse vacío, problemas para controlar la ira y la paranoia.

"Sentí mucho alivio cuando supe que la persona que me maltrataba estaba enferma. Por fin tenía una respuesta'', señala Kreger, cuando un doctor le explicó lo que tenía ese familiar suyo que la quería pero también la maltrataba. Luego de años de terapia y esfuerzo personal ha podido tener una vida más normal. Su libro Deja de andar sobre cáscaras de huevo, es un manual de vida para las personas que han sido directamente afectadas por el BPD en un ser querido.

En el caso del afectado por el BPD, hay medicamentos que ayudan a estabilizar su estado de ánimo y comportamiento, así como terapias. Sin embargo, "demora muchos años'' por las características de la condición, afirma Rothe.

El BDP afecta a entre el 1 y 2 por ciento de la población y es más común en las mujeres que en los hombres. Según el doctor Aguilar-Gaxiola no hay estudios sobre esta condición en la comunidad hispana.

 

Fuente: Especial/El Nuevo Herald